28/05/2014

Más sobre las elecciones


“Dios Padre y Madre
que enseñas a los corazones de tus fieles
con la luz del
Espíritu Santo,
concédenos juzgar rectamente según el mismo Espíritu
y gozar siempre de su consuelo”.

Nadie podía dudar de la presencia del Espíritu Santo esta mañana, cuando las Capitulares se reunieron para la Eucaristía, presidida por el Padre General de los Oblatos de María Inmaculada.

Como es costumbre, presidió también la elección de la Superiora General, que tuvo lugar inmediatamente después de la Eucaristía.

Christine abre el proceso.

A través de unas breves palabras añadió un aspecto más sobre el discernimiento: les dijo que se trataba de una elección no entre lo bueno y lo malo, ni entre lo bueno y lo menos bueno, o entre una hermana buena y otra menos buena, sino que lo que se estaba buscando  era una persona que poder llevar adelante esa Misión. 

Se brindó una última oportunidad para quien todavía deseara  hablar. No hubo nadie que quisiera hacerlo y se siguió adelante con el proceso de elección.

10 de la mañana

De pie cantaron el Veni Creator.

Después Margaret, Presidenta del Capítulo, leyó el artículo 65 de lasConstituciones,  que trata de la elección de la Superiora General.

La elección se llevó a cabo según lo establecido en el mismo.

Y ya sabemos el resultado.



 
Cuando le preguntaron a Ana María si aceptaba, ella respondió: “Confiando en Dios y en mis hermanas, acepto.” Después,  un aplauso ensordecedor y  las felicitaciones de todas, cada una a su manera.



 
11h 30 de la mañana

Después de una pausa para asimilar las emociones del momento, las Capitulares se reunieron de nuevo pero ya, a partir de ese momento, con Ana María como presidenta del Capítulo.

Fue el momento en que, Ana María expresó unas palabras espontáneas de agradecimiento.

Las primeras palabras de Ana María fueron de agradecimiento al Consejo anterior, sin cuyo trabajo no habrían llegado a esta etapa. Un agradecimiento muy especial estaba reservado a Margaret por todo lo que ha realizado y compartido durante todos estos años, y le  aseguró que seguirá contando con ella. Mencionó a todas y a cada una de las consejeras por su nombre: Maria Carmen, Colleen, Kumudini, Micheline, Marian, Bernadette.

Todas, incluida Margaret, recibieron un ramo de flores como signo de agradecimiento.

Margaret habló de lo agradecida que estaba, diciendo que había sido "una gracia y un don el poder servir a la Familia". En ella permanece un sentido de conexión con todos y nunca olvidará a nadie. También agradeció a los dos equipos con los que ha trabajado durante sus dos mandatos. 
María Carmen Vilardell  dijo: “Esta es una ocasión privilegiada para dirigirme a todas las Unidades del Instituto y a través del Instituto a toda la Familia para agradecer vuestra unión y vuestras oraciones en mi situación, que todas conocéis. Pero soy yo la que tengo que agradeceros por lo  vivido, que ha sido una riqueza, porque la vida entre luces y sombras, vale la pena vivirla, y yo seguiré viviendo para que juntas vayamos adelante, estemos donde estemos y en las circunstancias  que estemos. Muchas gracias.”

Christine aprovechó la oportunidad para agradecer a todas por el camino que habían vivido en el proceso de elección.

Elección de la Vicaria de las contemplativas

La eligieron las hermanas del Vicariato.

Las Hermanas Contemplativas habían elaborado una lista de nominaciones para el Vicariato. La elección siguió el mismo proceso que el de la Superiora General. El resultado ya lo conocen: Bernadette aceptó este servicio y su aceptación fue recibida con un gran aplauso por parte de las Capitulares.

 
Sesión de la tarde

Proceso de elección de las consejeras


En algunos aspectos es semejante al de la Superiora General. Los criterios para la elección de personas son los mismos, pero el criterio principal es la creación de un equipo que pueda ayudar a Ana María a llevar adelante la Misión. Esto exigirá diferentes cualidades, habilidades, experiencia. Es importante tener en cuenta dónde y  hasta qué punto predomina un idioma y cómo esto repercute en las necesidades de la formación. Pero no es un obstáculo de primer orden.

Así el discernimiento es continuo durante todo el proceso de elección y el equipo se va formando poco a poco.

Las capitulares dedicaron un tiempo a reunirse en grupos de distintas nacionalidades, para pensar en equipos de personas que les pareciera que podían ser complementarias. Intercambiaron en torno a este tema y elaboraron una lista de nombres para rezar y reflexionar sobre ella hasta mañana.

 

 
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